07-05-2019, 06:38 AM
Buenos días queridos hermanos.
Comencemos por hacernos esta pregunta:
¿Qué es realmente la Iglesia de Dios?
Estaremos de acuerdo en afirmar que está compuesta por aquellos que han sido redimidos por Cristo, han sido lavados en su sangre, nacidos del Espíritu, poseen una Nueva Naturaleza, están sellados por el Espíritu Santo y, por lo tanto, son bautizados en un cuerpo cuya cabeza es Cristo dirigiendo su Cuerpo desde el cielo, leemos:
Eph_1:22 y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,
Eph 1:23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
De manera que los creyentes en Jesús están vinculados con Él en gloria, así que nosotros somos miembros de Su cuerpo.
No somos miembros de una comunidad religiosa regentada por el hombre bajo su propio gobierno y estatutos extraídos de la biblia, pero fuera de contexto, para darle una apariencia de “verdad”, tal membresía no proviene de Dios sino del hombre y el Nuevo Testamento condena tal idea.
Cuando leemos “A la iglesia de Dios que está en Corinto” el cartero no tendría problema para llevar esta carta a sus destinatarios por cuanto en esa época solo existía una iglesia en cada lugar.
Y en la edad apostólica, cuando comenzó la Iglesia de Dios, solo los verdaderos hijos de Dios estaban en sus filas; el caso de Ananías y Safira lo demuestra, ellos fueron cortados de la comunión de la asamblea por medio de la muerte y esto generó un temor santo que hasta daba miedo juntarse a los apóstoles (Hch.5:13).
Pero ahora no es así, existe el “mundo denominacional” congregado bajo otros parámetros y propósitos, ajenos al modelo bíblico de la Doctrina de la Iglesia donde la preeminencia es de Cristo y no del hombre:
“Y LO DIO POR CABEZA SOBRE TODAS LAS COSAS A LA IGLESIA"
Cuando los hombres y mujeres piadosos escuchan en sus asambleas:
“Todo debe de hacerse conforme al “gobierno de los ancianos”
Entonces ya tenemos otro amo encima nuestro que no es Cristo ni su bendita Palabra.
1. EL SANEDRÍN
Y esto ocurre porque las conciencias no se ejercitan, no solicitan que se les explique cuantos “gobiernos” hay en la asamblea.
Porque por ningún lado aparece el “gobierno de los ancianos” como cabeza de la asamblea.
Entonces algo está fallando.
Y al no investigarse la Palabra de Dios se da inicio al establecimiento de una casta sacerdotal a la cual se le tiene que rendir obediencia y sujeción llamada “EL GOBIERNO DE LOS ANCIANOS”, tal como ocurría en el Sanedrín del judaísmo, el mismo que asesinó a nuestro Señor Jesucristo.
Su origen, de acuerdo con la tradición judía, se remonta a los tiempos de Moisés (Num11:16-17)
Bajo los romanos el Sanedrín ejerció bastante poder. Podía condenar a muerte en casos de violación de leyes judías, pero no podían ejecutar la sentencia sin la aprobación del procurador romano (Jn.18:31)
En el tiempo de Jesús el Sanedrín todavía tenía mucho poder en Judea, solamente tenía jurisdicción allí.
Por eso no podían hacerle nada a Jesús hasta que él viniera a Jerusalén.
El oficio del Sanedrín en esta edad de la Iglesia es tenebroso, pisotea los derechos Soberanos del Espíritu Santo en la Iglesia de hoy.
El Espíritu Santo, en su obra en una asamblea, es reemplazado por el gobierno del hombre quedando prácticamente eliminado, aunque se le mencione de labios.
Y en estas condiciones extremas, de la iglesia de Dios que está en cualquier localidad, solo queda el nombre.
Porque cuando una asamblea se reúne bajo el gobierno de un Sanedrín llamado el “gobierno de los ancianos”, la vitalidad de su reunión ya no subsiste, porque será el gobierno del hombre y no de Cristo (“como Cabeza sobre todas las cosas”), quien mantiene “controlada” la congregación bajo su servicio.
Las asambleas de la iglesia primitiva estaban controladas por el Espíritu Santo moviéndose libremente mediante cualquier miembro del Cuerpo como Él quería, de forma ordenada, porque eran hombres llenos del Espíritu Santo y no llenos de la soberbia de su propio poder y autoridad para controlar a los demás bajo su “gobierno”.
2. LA DEMOCRACIA COMO POLÍTICA
Otro factor que ha generado que, en la asamblea, el gobierno de los ancianos haya sustituido el gobierno de Cristo por medio del Espíritu Santo, su legítimo representante, ha sido la política.
Han convertido la asamblea en un gobierno democrático.
La biblia designa a los ancianos como “los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan” (1Ts.5:12)
“LOS QUE TRABAJAN ENTRE VOSOTROS”
“no encima de nosotros” porque tal conducta destruye la UNIDAD del Cuerpo, y nosotros debemos reconocer a esta clase de ancianos que solo busca cumplir con la responsabilidad que tiene Cristo como Cabeza de dirigir la asamblea a través de la Escritura como nuestra máxima autoridad.
La dirección en una asamblea es una dirección teocrática ligada a la Palabra de Dios.
No es un gobierno democrático donde cada uno quiere mandar alejado de la Palabra de Dios haciendo su propia voluntad como en las democracias.
La palabra “democracia” significa el gobierno del pueblo.
En las asambleas no es así, el que dirige es Dios a través de Su Palabra y por medio de estos hombres, los cuales Él ha levantado.
Como le dijo el apóstol Pablo a los ancianos de Éfeso en Mileto, estas son palabras que siempre las oímos cuando se trata el asunto de los ancianos.
El apóstol Pablo los reúne y él les dice:
Hch 20:27 porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.
Hch 20:28 Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos…
No es uno que llega allí palanqueado por un familiar o por una recomendación.
No es uno que se toma la asamblea por asalto como Diótrefes.
No es uno que llega por otra vía distinta al Espíritu Santo que lo ha colocado allí como Obispo para apacentar la Iglesia del Señor que él ganó por su propia sangre.
3. UNA LAMENTABLE TRADUCCIÓN DEL TÉRMINO “PROISTEMI” (G4291).
Aparece en 8 ocasiones en el NT (Tit_3:8, Tit_3:14; 1Ti_3:5, 1Ti_5:17; Rom_12:8, 1Ti_3:4; 1Th_5:12; 1Ti_3:12)
... y en relación con los ancianos posee el significado de “presidir” como un don de Dios.
Para mencionar específicamente que alguien posee esta capacidad, tenemos que pensar previamente que ha habido en él un gran interés por los demás y los ha servido hasta demostrar esa cualidad.
Una cualidad que debe estar conforme a la enseñanza del Señor, leemos:
Mat_20:26 Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,
Mat_20:28 como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
En Romanos 12:7 se la usa en relación con el movimiento de todo el cuerpo, y el término griego "proistemi" significa literalmente: “estar delante”.
Es precisamente la posición del pastor tal como el Señor Jesús la explicó en Juan 10: “Cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas” (v. 4).
Así la relación de sujeción estaba vinculada con alguien que las amaba y podía presidirlas hablándoles.
En Lucas 24:50, “los sacó fuera hasta Betania, y alzando sus manos los bendijo”, tiene el mismo sentido, que es el concentrar a los suyos detrás del Pastor para oír de él, cuando ni la religión, ni la política nacional tenía respuestas a las muchas expectativas que Cristo había creado en ellos.
Pero cuando este término se traduce como “GOBIERNO” en relación con los ancianos, se pierde el verdadero significado del don de “presidir” como un servicio a Cristo y se confunde carnalmente con el gobierno de los hombres sin Cristo como Poncio Pilato, por ejemplo, leemos:
Mat 27:2 Y le llevaron atado, y le entregaron a Poncio Pilato, el gobernador (Hegemón G2232).
De esta palabra griega se deriva el término “HEGEMONÍA”, que en el contexto que nos ocupa significa la supremacía del “Gobierno” de los ancianos sobre los demás hermanos.
Pero no todas las versiones traducen igual, las hay aquellas que traducen correctamente el término “proistemi”, como, por ejemplo las siguientes:
(Darby) Let the elders who take the lead among the saints well be esteemed worthy of double honour, specially those labouring in word and teaching;
(BAD) Los ancianos que dirigen bien los asuntos de la iglesia son dignos de doble honor, especialmente los que dedican sus esfuerzos a la predicación y a la enseñanza.
(Castillian) Los presbíteros que desempeñan bien su cargo merecen doble honorario, sobre todo los que trabajan en la palabra y en la enseñanza.
("CJ") Los presbíteros que ejercen bien su cargo merecen doble remuneración, principalmente los que se afanan en la predicación y en la enseñanza.
(Jünemann*) Los que bellamente presiden, presbíteros, de doble honor son dignos; máximamente los que se fatigan en palabra y enseñanza.
(NC*) Los presbíteros que presiden bien, sean tenidos en doble honor, sobre todo los que se ocupan en la predicación y la enseñanza.
EL OFICIO DE LOS ANCIANOS SEGÚN LAS ESCRITURAS
Estamos considerando la tremenda responsabilidad de estar al frente del pueblo del Señor, y que es poco comprendido por aquellos que no llevan ese peso. Solo cuando se está poniendo el hombro para llevar este peso, es cuando se empieza a entender la gran obra que esto significa, pues no se trata de un cargo sino de una carga y por lo tanto requiere mucho de la oración del pueblo del Señor.
Esta lista de requisitos para los ancianos y diáconos 1 de Timoteo 3:1-16; Tito 1:5-9 no es algo exclusivo para ellos, pues todo creyente debería cumplir con estos requisitos, pues preguntamos:
¿Entonces el que no es anciano puede tener más de una mujer?
¿O puede ser un enamorador?
¿El que no es anciano puede ser dado al vino, puede ser un pendenciero?
Y a veces usamos esta Escritura para tratar de descalificar y tal cosa no es la intención acá, el apóstol está escribiendo sobre la necesidad que los hombres que van a llevar la responsabilidad de apacentar, de conducir, de presidir al pueblo del Señor, tengan estas cualidades. Y esto va a resaltar y a distinguir su obra; pero que indudablemente todo creyente debe procurar guardar estas recomendaciones acá y el que anhela obispado, mucho más.
Es bueno destacar esto porque a veces se está vigilando la conducta del anciano con perversidad… la Biblia nos manda a que observemos cual ha sido el resultado de su conducta, pero como ejemplo, entonces imitad su fe. Pero cuando se está al acecho para “cazarlo” en alguna falla de las que están escritas aquí para descalificarlo, en murmuraciones, esto ya es maldad. Pues esta lista no es para sacar fuera un anciano, sino más bien para destacar aquellos que llevan responsabilidad.
El anciano no es uno que está escapando de los trabajos arduos del mundo secular porque es un hombre flojo y se refugia en el evangelio para apacentarse, asimismo. Dios no llama a hombres ociosos a su obra, y en Israel los había:
Eze_34:2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños?
El Señor reclama:
Eze 34:4 No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia.
Esta es una indicación que el Señor no levantó a esta clase de Pastor… porque un hombre a quien Dios ha levantado no se va a endurecer como Diótrefes que expulsaba de la iglesia a las familias que recibían en la casa a unos misioneros, unos predicadores que venían ayudar:
“Oye me van a quitar el poder, mi prestigio, van a predicar mejor que yo”
Tal pensamiento es una cosa egoísta.
El Señor está reclamando “Os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia”.
“Ni buscasteis la perdida”
En ocasiones los hermanos dejan de venir a los cultos por distintas razones, el transporte, los apagones, o cualquier otra razón, entonces es deber de los ancianos que las apacientan orar al Señor y conocer sí la oveja está enferma o qué problemas tiene para congregarse y visitarla.
Hay asambleas donde hay un grupo de hermanos y hermanas dedicados a este noble servicio.
Es una conducta carnal que, en lugar de ir a buscar la oveja, y conversar con ella, se aproveche la ocasión para exhortar con un “palo en la mano” citando el pasaje de Hebreos 10:25 “no dejando de congregarnos como algunos tienen por costumbre”.
Por otro lado, si una asamblea es guiada por el Espíritu Santo no debe existir temor de tener una tribuna abierta.
Pero que el ministerio de la Palabra sea solamente autorizado por una persona que se atribuye este gobierno, es algo desastroso.
2Co_3:17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Algunos alegan que la experiencia enseña que hay muchos que se aprovechan de esta libertad y se repiten una y otra vez.
Bueno, para esto están los ancianos, para corregir con amor y paciencia tales conductas.
En un estudio de la Palabra, la intervención debe ser participativa… cada uno considerando un tiempo prudente, pero cuando surge un Diótrefes ordenando quién participa, entonces se contrista al Espíritu Santo, y los hermanos piadosos que han estado en comunión con Señor y traen algo que ofrecer para la edificación de su pueblo, quedan marginados.
Estamos esperando la venida del Señor.
Ojalá que podamos entender que la asamblea le pertenece a Cristo y no al hombre.
Oremos porque el Señor levante hombres llenos del Espíritu Santo para apacentar, conducir, dirigir, Su Grey…porque la asamblea que tiene esta esperanza de su pronta venida, se purifica así misma como el es puro, porque como está escrito:
Heb_12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Que el Señor bendiga Su Palabra.
Comencemos por hacernos esta pregunta:
¿Qué es realmente la Iglesia de Dios?
Estaremos de acuerdo en afirmar que está compuesta por aquellos que han sido redimidos por Cristo, han sido lavados en su sangre, nacidos del Espíritu, poseen una Nueva Naturaleza, están sellados por el Espíritu Santo y, por lo tanto, son bautizados en un cuerpo cuya cabeza es Cristo dirigiendo su Cuerpo desde el cielo, leemos:
Eph_1:22 y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,
Eph 1:23 la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
De manera que los creyentes en Jesús están vinculados con Él en gloria, así que nosotros somos miembros de Su cuerpo.
No somos miembros de una comunidad religiosa regentada por el hombre bajo su propio gobierno y estatutos extraídos de la biblia, pero fuera de contexto, para darle una apariencia de “verdad”, tal membresía no proviene de Dios sino del hombre y el Nuevo Testamento condena tal idea.
Cuando leemos “A la iglesia de Dios que está en Corinto” el cartero no tendría problema para llevar esta carta a sus destinatarios por cuanto en esa época solo existía una iglesia en cada lugar.
Y en la edad apostólica, cuando comenzó la Iglesia de Dios, solo los verdaderos hijos de Dios estaban en sus filas; el caso de Ananías y Safira lo demuestra, ellos fueron cortados de la comunión de la asamblea por medio de la muerte y esto generó un temor santo que hasta daba miedo juntarse a los apóstoles (Hch.5:13).
Pero ahora no es así, existe el “mundo denominacional” congregado bajo otros parámetros y propósitos, ajenos al modelo bíblico de la Doctrina de la Iglesia donde la preeminencia es de Cristo y no del hombre:
“Y LO DIO POR CABEZA SOBRE TODAS LAS COSAS A LA IGLESIA"
Cuando los hombres y mujeres piadosos escuchan en sus asambleas:
“Todo debe de hacerse conforme al “gobierno de los ancianos”
Entonces ya tenemos otro amo encima nuestro que no es Cristo ni su bendita Palabra.
1. EL SANEDRÍN
Y esto ocurre porque las conciencias no se ejercitan, no solicitan que se les explique cuantos “gobiernos” hay en la asamblea.
Porque por ningún lado aparece el “gobierno de los ancianos” como cabeza de la asamblea.
Entonces algo está fallando.
Y al no investigarse la Palabra de Dios se da inicio al establecimiento de una casta sacerdotal a la cual se le tiene que rendir obediencia y sujeción llamada “EL GOBIERNO DE LOS ANCIANOS”, tal como ocurría en el Sanedrín del judaísmo, el mismo que asesinó a nuestro Señor Jesucristo.
Su origen, de acuerdo con la tradición judía, se remonta a los tiempos de Moisés (Num11:16-17)
Bajo los romanos el Sanedrín ejerció bastante poder. Podía condenar a muerte en casos de violación de leyes judías, pero no podían ejecutar la sentencia sin la aprobación del procurador romano (Jn.18:31)
En el tiempo de Jesús el Sanedrín todavía tenía mucho poder en Judea, solamente tenía jurisdicción allí.
Por eso no podían hacerle nada a Jesús hasta que él viniera a Jerusalén.
El oficio del Sanedrín en esta edad de la Iglesia es tenebroso, pisotea los derechos Soberanos del Espíritu Santo en la Iglesia de hoy.
El Espíritu Santo, en su obra en una asamblea, es reemplazado por el gobierno del hombre quedando prácticamente eliminado, aunque se le mencione de labios.
Y en estas condiciones extremas, de la iglesia de Dios que está en cualquier localidad, solo queda el nombre.
Porque cuando una asamblea se reúne bajo el gobierno de un Sanedrín llamado el “gobierno de los ancianos”, la vitalidad de su reunión ya no subsiste, porque será el gobierno del hombre y no de Cristo (“como Cabeza sobre todas las cosas”), quien mantiene “controlada” la congregación bajo su servicio.
Las asambleas de la iglesia primitiva estaban controladas por el Espíritu Santo moviéndose libremente mediante cualquier miembro del Cuerpo como Él quería, de forma ordenada, porque eran hombres llenos del Espíritu Santo y no llenos de la soberbia de su propio poder y autoridad para controlar a los demás bajo su “gobierno”.
2. LA DEMOCRACIA COMO POLÍTICA
Otro factor que ha generado que, en la asamblea, el gobierno de los ancianos haya sustituido el gobierno de Cristo por medio del Espíritu Santo, su legítimo representante, ha sido la política.
Han convertido la asamblea en un gobierno democrático.
La biblia designa a los ancianos como “los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan” (1Ts.5:12)
“LOS QUE TRABAJAN ENTRE VOSOTROS”
“no encima de nosotros” porque tal conducta destruye la UNIDAD del Cuerpo, y nosotros debemos reconocer a esta clase de ancianos que solo busca cumplir con la responsabilidad que tiene Cristo como Cabeza de dirigir la asamblea a través de la Escritura como nuestra máxima autoridad.
La dirección en una asamblea es una dirección teocrática ligada a la Palabra de Dios.
No es un gobierno democrático donde cada uno quiere mandar alejado de la Palabra de Dios haciendo su propia voluntad como en las democracias.
La palabra “democracia” significa el gobierno del pueblo.
En las asambleas no es así, el que dirige es Dios a través de Su Palabra y por medio de estos hombres, los cuales Él ha levantado.
Como le dijo el apóstol Pablo a los ancianos de Éfeso en Mileto, estas son palabras que siempre las oímos cuando se trata el asunto de los ancianos.
El apóstol Pablo los reúne y él les dice:
Hch 20:27 porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.
Hch 20:28 Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos…
No es uno que llega allí palanqueado por un familiar o por una recomendación.
No es uno que se toma la asamblea por asalto como Diótrefes.
No es uno que llega por otra vía distinta al Espíritu Santo que lo ha colocado allí como Obispo para apacentar la Iglesia del Señor que él ganó por su propia sangre.
3. UNA LAMENTABLE TRADUCCIÓN DEL TÉRMINO “PROISTEMI” (G4291).
Aparece en 8 ocasiones en el NT (Tit_3:8, Tit_3:14; 1Ti_3:5, 1Ti_5:17; Rom_12:8, 1Ti_3:4; 1Th_5:12; 1Ti_3:12)
... y en relación con los ancianos posee el significado de “presidir” como un don de Dios.
Para mencionar específicamente que alguien posee esta capacidad, tenemos que pensar previamente que ha habido en él un gran interés por los demás y los ha servido hasta demostrar esa cualidad.
Una cualidad que debe estar conforme a la enseñanza del Señor, leemos:
Mat_20:26 Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,
Mat_20:28 como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
En Romanos 12:7 se la usa en relación con el movimiento de todo el cuerpo, y el término griego "proistemi" significa literalmente: “estar delante”.
Es precisamente la posición del pastor tal como el Señor Jesús la explicó en Juan 10: “Cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas” (v. 4).
Así la relación de sujeción estaba vinculada con alguien que las amaba y podía presidirlas hablándoles.
En Lucas 24:50, “los sacó fuera hasta Betania, y alzando sus manos los bendijo”, tiene el mismo sentido, que es el concentrar a los suyos detrás del Pastor para oír de él, cuando ni la religión, ni la política nacional tenía respuestas a las muchas expectativas que Cristo había creado en ellos.
Pero cuando este término se traduce como “GOBIERNO” en relación con los ancianos, se pierde el verdadero significado del don de “presidir” como un servicio a Cristo y se confunde carnalmente con el gobierno de los hombres sin Cristo como Poncio Pilato, por ejemplo, leemos:
Mat 27:2 Y le llevaron atado, y le entregaron a Poncio Pilato, el gobernador (Hegemón G2232).
De esta palabra griega se deriva el término “HEGEMONÍA”, que en el contexto que nos ocupa significa la supremacía del “Gobierno” de los ancianos sobre los demás hermanos.
Pero no todas las versiones traducen igual, las hay aquellas que traducen correctamente el término “proistemi”, como, por ejemplo las siguientes:
(Darby) Let the elders who take the lead among the saints well be esteemed worthy of double honour, specially those labouring in word and teaching;
(BAD) Los ancianos que dirigen bien los asuntos de la iglesia son dignos de doble honor, especialmente los que dedican sus esfuerzos a la predicación y a la enseñanza.
(Castillian) Los presbíteros que desempeñan bien su cargo merecen doble honorario, sobre todo los que trabajan en la palabra y en la enseñanza.
("CJ") Los presbíteros que ejercen bien su cargo merecen doble remuneración, principalmente los que se afanan en la predicación y en la enseñanza.
(Jünemann*) Los que bellamente presiden, presbíteros, de doble honor son dignos; máximamente los que se fatigan en palabra y enseñanza.
(NC*) Los presbíteros que presiden bien, sean tenidos en doble honor, sobre todo los que se ocupan en la predicación y la enseñanza.
EL OFICIO DE LOS ANCIANOS SEGÚN LAS ESCRITURAS
Estamos considerando la tremenda responsabilidad de estar al frente del pueblo del Señor, y que es poco comprendido por aquellos que no llevan ese peso. Solo cuando se está poniendo el hombro para llevar este peso, es cuando se empieza a entender la gran obra que esto significa, pues no se trata de un cargo sino de una carga y por lo tanto requiere mucho de la oración del pueblo del Señor.
Esta lista de requisitos para los ancianos y diáconos 1 de Timoteo 3:1-16; Tito 1:5-9 no es algo exclusivo para ellos, pues todo creyente debería cumplir con estos requisitos, pues preguntamos:
¿Entonces el que no es anciano puede tener más de una mujer?
¿O puede ser un enamorador?
¿El que no es anciano puede ser dado al vino, puede ser un pendenciero?
Y a veces usamos esta Escritura para tratar de descalificar y tal cosa no es la intención acá, el apóstol está escribiendo sobre la necesidad que los hombres que van a llevar la responsabilidad de apacentar, de conducir, de presidir al pueblo del Señor, tengan estas cualidades. Y esto va a resaltar y a distinguir su obra; pero que indudablemente todo creyente debe procurar guardar estas recomendaciones acá y el que anhela obispado, mucho más.
Es bueno destacar esto porque a veces se está vigilando la conducta del anciano con perversidad… la Biblia nos manda a que observemos cual ha sido el resultado de su conducta, pero como ejemplo, entonces imitad su fe. Pero cuando se está al acecho para “cazarlo” en alguna falla de las que están escritas aquí para descalificarlo, en murmuraciones, esto ya es maldad. Pues esta lista no es para sacar fuera un anciano, sino más bien para destacar aquellos que llevan responsabilidad.
El anciano no es uno que está escapando de los trabajos arduos del mundo secular porque es un hombre flojo y se refugia en el evangelio para apacentarse, asimismo. Dios no llama a hombres ociosos a su obra, y en Israel los había:
Eze_34:2 Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños?
El Señor reclama:
Eze 34:4 No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia.
Esta es una indicación que el Señor no levantó a esta clase de Pastor… porque un hombre a quien Dios ha levantado no se va a endurecer como Diótrefes que expulsaba de la iglesia a las familias que recibían en la casa a unos misioneros, unos predicadores que venían ayudar:
“Oye me van a quitar el poder, mi prestigio, van a predicar mejor que yo”
Tal pensamiento es una cosa egoísta.
El Señor está reclamando “Os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia”.
“Ni buscasteis la perdida”
En ocasiones los hermanos dejan de venir a los cultos por distintas razones, el transporte, los apagones, o cualquier otra razón, entonces es deber de los ancianos que las apacientan orar al Señor y conocer sí la oveja está enferma o qué problemas tiene para congregarse y visitarla.
Hay asambleas donde hay un grupo de hermanos y hermanas dedicados a este noble servicio.
Es una conducta carnal que, en lugar de ir a buscar la oveja, y conversar con ella, se aproveche la ocasión para exhortar con un “palo en la mano” citando el pasaje de Hebreos 10:25 “no dejando de congregarnos como algunos tienen por costumbre”.
Por otro lado, si una asamblea es guiada por el Espíritu Santo no debe existir temor de tener una tribuna abierta.
Pero que el ministerio de la Palabra sea solamente autorizado por una persona que se atribuye este gobierno, es algo desastroso.
2Co_3:17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Algunos alegan que la experiencia enseña que hay muchos que se aprovechan de esta libertad y se repiten una y otra vez.
Bueno, para esto están los ancianos, para corregir con amor y paciencia tales conductas.
En un estudio de la Palabra, la intervención debe ser participativa… cada uno considerando un tiempo prudente, pero cuando surge un Diótrefes ordenando quién participa, entonces se contrista al Espíritu Santo, y los hermanos piadosos que han estado en comunión con Señor y traen algo que ofrecer para la edificación de su pueblo, quedan marginados.
Estamos esperando la venida del Señor.
Ojalá que podamos entender que la asamblea le pertenece a Cristo y no al hombre.
Oremos porque el Señor levante hombres llenos del Espíritu Santo para apacentar, conducir, dirigir, Su Grey…porque la asamblea que tiene esta esperanza de su pronta venida, se purifica así misma como el es puro, porque como está escrito:
Heb_12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Que el Señor bendiga Su Palabra.