21-11-2009, 10:15 AM
¡Qué difícil es tratar estos temas sin apasionamientos! Yo no soy teólogo, pero me gusta que la Biblia hable por sí misma, pues he visto que no necesita que la defendamos, ella se defiende por si misma.
Col 2:8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.
Col 2:9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Jua 1:1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Jua 1:2 Este era en el principio con Dios.
Jua 1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Jua 1:4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Jua 1:5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Jua 1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Rom 9:5 de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
Jesús, es hombre en toda la implicación que esto deduce, pero al haber nacido de María sin la intervención de hombre sino del Espíritu Santo, la naturaleza de pecado no le afectó a él y por ello es impecable aunque susceptible de ser tentado.
Estaba limitado de tiempo y de espacio, sin embargo, Jesús es Dios también y al mismo tiempo.
Esto puede explicar el porque en ocasiones hablaba como hombre, pero en otras hablaba como Dios; en Efesios 2, implica que se despojo de sus consideraciones divinas al limitarse a las de hombre y por ello se describe que se despojó, pero no implica bajo ninguna circunstancia que dejo de ser.
En muchas ocasiones, creo que todo cristano verdadero quiesiera poder abrazar a Jesús, el Cristo, el Hijo del Dios viviente como un acto de profunda adoración y amor por nuestro Salvador, pero no podemos, porque nuestro cuerpo está limitado y solo por fe y en nustro corazón, caemos a sus pies por si maravillosa gracia con que nos favorese inmerecidamente.
La palabra de Dios no separa a Jesús de Cristo y aunque los prejucios nos ganen porque hay quien odía a la iglesia católica y aquí aclaro que no simpatizo en nada con su doctrina, debo reconocer que no es incorrecto llamar a Jesús y a Cristo Jesucristo, porque es la misma persona.
"El Verbo se hizo carne" = Jesucristo y para los que somos guiados por el Espíritu de Dios, "El Señor Jesucristo", mi Rey y mi Señor y de todo aquel que así lo crea.
2Jn 1:7 Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Quien esto hace es el engañador y el anticristo.
Col 2:8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.
Col 2:9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
Jua 1:1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Jua 1:2 Este era en el principio con Dios.
Jua 1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
Jua 1:4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
Jua 1:5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Jua 1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Rom 9:5 de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
Jesús, es hombre en toda la implicación que esto deduce, pero al haber nacido de María sin la intervención de hombre sino del Espíritu Santo, la naturaleza de pecado no le afectó a él y por ello es impecable aunque susceptible de ser tentado.
Estaba limitado de tiempo y de espacio, sin embargo, Jesús es Dios también y al mismo tiempo.
Esto puede explicar el porque en ocasiones hablaba como hombre, pero en otras hablaba como Dios; en Efesios 2, implica que se despojo de sus consideraciones divinas al limitarse a las de hombre y por ello se describe que se despojó, pero no implica bajo ninguna circunstancia que dejo de ser.
En muchas ocasiones, creo que todo cristano verdadero quiesiera poder abrazar a Jesús, el Cristo, el Hijo del Dios viviente como un acto de profunda adoración y amor por nuestro Salvador, pero no podemos, porque nuestro cuerpo está limitado y solo por fe y en nustro corazón, caemos a sus pies por si maravillosa gracia con que nos favorese inmerecidamente.
La palabra de Dios no separa a Jesús de Cristo y aunque los prejucios nos ganen porque hay quien odía a la iglesia católica y aquí aclaro que no simpatizo en nada con su doctrina, debo reconocer que no es incorrecto llamar a Jesús y a Cristo Jesucristo, porque es la misma persona.
"El Verbo se hizo carne" = Jesucristo y para los que somos guiados por el Espíritu de Dios, "El Señor Jesucristo", mi Rey y mi Señor y de todo aquel que así lo crea.
2Jn 1:7 Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Quien esto hace es el engañador y el anticristo.